miércoles, 30 de diciembre de 2009

ENCUENTRO 10 AÑOS DE COMUNISMO LIBERTARIO



Este año se cumplen diez desde que un grupo de militantes del anarco-comunismo se reunieron para discutir la proyección de sus principios y objetivos al interior de nuestra clase, la de los explotados. Fue ese momento en el que el anarquismo social, es decir, un anarquismo que se sustenta y busca influir en el espacio social se vio nuevamente vivo en el país.


Hoy, como militantes que somos del comunismo anárquico y de la clase dominada, vemos la importancia de hacer una evaluación de lo que han sido estos diez años de resurgir, trabajar, de ponernos nuevamente de pie, más a partir de las muchas y diversas vivencias de las organizaciones populares y políticas y su trascendencia en el espacio social.

A partir de dicha mirada hacia el pasado, de nuestra evaluación del presente y nuestra perspectiva hacia el futuro es que nace la voluntad de realizar este encuentro

8 DE ENERO: 18:00 A 21:00

- Revision historica del anarquismo en Chile
-Origenes e ideas fuerza del Anarquismo social.

9 DE ENERO: 15:30 A 20:00

- Revision de experiencias sociales
- Propuestas y perspectivas desde el Anarquismo social.

Lugar: CNTC. Almirante Hurtado #2069. Metro Toesca.


POR EL SOCIALISMO Y LA LIBERTAD, ARRIBA LOS QUE LUCHAN

Organiza y Convoca: Organizacion Revolucionaria Anarquista Voz Negra, Estrategia Libertaria, Corriente de Accion Libertaria, Revista Hombre y Sociedad, Frente de Estudiantes Libertarios, La Batalla de los Trabajadores.

viernes, 21 de agosto de 2009

ORGANIZACION ANARQUISTA. UN DEBATE NECESARIO Y ACTUAL




Uno de los grandes debates al interior del movimiento libertario ha sido el tema de la organización. Las constantes pugnas entre organizativos y anti-organizativos, han ocupado gran cantidad de paginas y artículos, por ende es necesario tomar posiciones al respecto.
Es fundamental a la hora de comenzar el trabajo militante el tener claro los elementos teóricos y prácticos, que impulsen un proyecto estratégico donde nuevamente las ideas libertarias logren ser protagonistas en las luchas que libran los explotados y oprimidos.
Es necesario dejar claro que cuando hablamos de organización debemos pensarla desde tres ámbitos distintos pero que guardan estrecha relación. Por un lado tenemos la organización como principio y condición de la vida social, por otro la organización de las fuerzas populares en la defensa de sus intereses y por último la organización política anarquista.

LA ORGANIZACIÓN COMO PRINCIPIO Y CONDICIÓN DE LA VIDA SOCIAL.

Es necesario definir cual es nuestra concepción frente al tema de la organización y que funciones tiene esta en el funcionamiento de la sociedad, para desde ahí asumir una política libertaria al respecto.
En este sentido concordamos con lo que plantea Malatesta, cuando caracteriza la organización como condición natural y necesaria de la vida social, cuyos elementos fundamentales son la cooperación y la solidaridad, por lo tanto, esta ha sido una herramienta natural que los seres humanos han utilizado para solucionar sus problemas en pos del bien común.
Sin embargo, existen otros individuos, que a través de esta, han logrado mantener una opresión milenaria explotando para su propio beneficio el trabajo de los demás. Este pequeño número de privilegiados ha sostenido su dominación, en gran parte, por la incapacidad de la mayoría de los demás que no han podido organizarse con sus pares en beneficio de sus propios intereses y necesidades.
Ante esto la organización pasa a ser un elemento fundamental en el conflicto de clases, y es aquí donde el anarquismo cobra real sentido, ya que históricamente su misión ha sido potenciar y fortalecer las organizaciones populares. Es por esta razón que las políticas de nuestra organización apuntan hacia esto.
Es necesario aclarar que nuestro interés no es hacer un culto a la organización y que mucho menos es dirigir mesiánicamente a los demás, como plantean muchos anarquistas individualistas y anti-organización, que de igual manera generan organización para sus acciones.
Su crítica fundamental gira en torno a que no puede haber organización sin autoridad. En este sentido, si la organización es parte natural y necesaria de la vida social, cabe preguntarse si puede existir sin autoridad.
Por lo general se tiende a pensar que una organización al intentar coordinar la acción propia y la de otros, viola la libertad y la iniciativa individual, y por ende es autoritaria. Cuestión que a nuestro parecer es un grave error. Si estamos claros que el anarquismo reivindica la libertad individual y colectiva, esta se debe incentivar desde las mismas organizaciones que ha creado la clase para defender sus intereses, y no aislarse de estas, ya que esta es la única manera de enfrentar el conflicto de clase que se presenta cuando existen influencias artificiales, que buscan servirse de la fuerza colectiva con el único fin de imponer autoritariamente sus intereses. Es solo en la cooperación y solidaridad donde el hombre encuentra los medios para desplegar su autoridad y su poder de iniciativa.

LA ORGANIZACIÓN DE LAS FUERZAS POPULARES

Este ámbito tiene que ver con la organización de los sujetos populares, independiente de sus inclinaciones políticas (sindicatos, organizaciones estudiantiles, organizaciones vecinales, etc.) Es en este tipo de organizaciones donde la unidad del más amplio conjunto del pueblo es posible, y es donde los sujetos deberían velar por sus intereses colectivos.
Pese a no ser de una naturaleza “política” (entendida en el sentido de que no se constituyen desde un marco doctrinario y un programa social dado, reuniendo a gente de un diverso espectro), pueden politizarse con el curso del conflicto de clases.
Al mismo tiempo existe un nivel intermedio en el que se aglutinan elementos de un sujeto popular específico, pero que tienen en común ciertos lineamientos políticos. Esta inclinación política, no puede ser, en todo caso, tan definida como la requerida para pertenecer a una misma organización política. Ciertos militantes o activistas populares que comparten una misma visión y que comparten políticas en relación al punto específico que les une (sea la actividad sindical, estudiantil o poblacional), se organizan para formar una cierta tendencia en el seno de un movimiento u organización mayor.
Históricamente las organizaciones populares han seguido dinámicas de lucha, las cuales giran en torno a ciertas prácticas, como la solidaridad y la cooperación en la defensa de los intereses comunes; y la lucha contra la desigualdad y la injusticia social, y es esto lo que debe fortalecer y potenciar el anarquismo clasista y organizado.

LA ORGANIZACIÓN POLÍTICA ANARQUISTA.

Este ámbito es el más específico de la organización, y se compone de personas provenientes de diversos sujetos y organizaciones populares (estudiantes, trabajadores, etc.), quienes comparten una orientación política y un programa (que en nuestro caso es de corte libertario y revolucionario). Al ser provenientes de diversos espacios sociales, resulta evidente que éste ámbito podrá referirse, primordialmente, a cambios de toda la sociedad. La unidad, en este ámbito, es mucho más restringida, sin perder el principio federativo que asegura la plena autonomía de sus integrantes, aceptando eso sí la necesidad de niveles superiores de unidad táctica e ideológica.
Tomando como referencia lo planteado anteriormente, es necesario referirnos al como concebimos el tema de la organización al interior del movimiento libertario.
La organización es un elemento vital e imprescindible, por tanto nadie puede estar ajeno a esta necesidad, ni a nivel general de sociedad, ni en particular, en el caso de una organización especifica anarquista.
Claramente definirse como una organización anarquista, compuesta por hombres y mujeres que se unen por iniciativa propia con miras a un fin en común, y que en conjunto se esfuerzan conscientemente en alcanzarlo, no tiene relación directa con la idea autoritaria de violar la libertad individual, como plantean muchos anarquistas.
No necesariamente seguir un programa especifico es sinónimo de sacrificar la libertad de los individuos o grupos que la componen, ya que, no se siguen caudillos, lideres ni jefes, por el contrario la adhesión a una línea programática responde a una responsabilidad colectiva con un conjunto de ideas y prácticas que deben influir lo más positivamente en la naturaleza humana y en la sociedad.
Entonces, una organización anarquista debe ser un conjunto de individuos y/o grupos que tienen un horizonte común y se esfuerzan por alcanzarlo. En este proceso, es natural que se entiendan entre ellos, unan sus fuerzas, se dividan el trabajo y ocupen las mejores tácticas para llegar a aquella meta en común.
Las características fundamentales que debe tener la organización anarquista, es la plena autonomía, la plena independencia, la responsabilidad colectiva, la libre asociación, el libre acuerdo y el deber de mantener los compromisos aceptados, son estos elementos los que deben reflejarse en la práctica concreta de la organización.
Todos los miembros o grupos que componen la organización pueden expresar libremente sus opiniones y utilizar cualquier táctica que no esté en contradicción con los principios aceptados y no dañen la actividad de los demás. La duración de la organización tiene estrecha relación con la afinidad de sus componentes y cuando ya no es capaz de cumplir una función útil es mejor que desaparezca, y dar paso a la creación de nuevas organizaciones más acordes con el contexto.

RELACIÓN ENTRE ORGANIZACIÓN POLÍTICA Y LAS FUERZAS POPULARES.

Pensamos que es legítima la interacción entre los diferentes ámbitos organizativos: así como es legítimo que los miembros de una organización política anarquista agiten su programa y las ideas libertarias en el seno de todas las organizaciones populares en donde participen, con el objetivo de popularizar sus ideas y tratar de ganar respaldo e influir saludablemente en las masas, es también perfectamente legítimo que la organización política anarquista se muestre flexible a los aportes que realice el movimiento popular, y sus expresiones sociales y políticas.
Nuestra intención no es emancipar al pueblo, al contrario buscamos entregar las herramientas que permitan el empoderamiento por parte de los sujetos de todos los asuntos de la vida, como forma de eliminar toda autoridad, alcanzando así su emancipación.
Sí como anarquistas sólo nos organizáramos en nuestra organización y no estuviésemos con los trabajadores, estudiantes y pobladores en cuanto somos trabajadores, estudiantes y pobladores; no podríamos lograr nada o sólo podríamos imponernos sobre los demás. En este caso por más que nos consideráramos anarquistas sólo seriamos simples burócratas distanciados de los reales deseos e intereses de la clase explotada y por ende dejaríamos de ser anarquistas. Favorecer las organizaciones populares, cualquiera sea su tipo, es consecuencia lógica de las ideas libertarias y por eso debe ser parte fundamental de nuestro programa
Una organización política anarquista bien constituida siempre estará pendiente de las variaciones del conflicto de clase, y por lo tanto, debe estar preparada para adecuar sus estrategias y tácticas a los diferentes contextos, lo que debería llevar a una mayor posibilidad de éxito en nuestro propósito final, la revolución social y el socialismo libertario. Sin embargo, mientras los anarquistas permanezcamos aislados, queriendo actuar cada uno por su lado sin entenderse con los demás lleva inevitablemente al fracaso, malgastando la energía en pequeños actos sin eficacia y que muy pronto los hará perder la fe en la meta cayendo en una completa inactividad.

viernes, 10 de julio de 2009

Herminia y Jaime Viven en las y los que luchan


Este martes 7 de julio, será recordado como el día en que la muerte nos ha arrebatado a dos grandes luchadores sociales; Herminia Concha y Jaime Echeverría.


Fallecimientos que asumimos con mucha tristeza. Sus vidas fueron y serán un ejemplo de convicción y lucha., que deben animar a las nuevas generaciones de luchadores sociales, por eso el mejor homenaje, ante sus muertes, es seguir luchando por los mismos principios que Herminia y Jaime lucharon: Justicia y Libertad



Hasta pronto queridos compañeros, desde su memoria de rebeldía hasta la emancipación de nosostros todos, los oprimidos.

jueves, 9 de julio de 2009

A LA MEMORIA DE HERMINIA CONCHA


Su pelo es de color gris producto de las canas, yo creo que cuando era joven tenia el pelo negro y mas largo que ahora, lleva un vestido blanco y un chaleco rojo, además de su bolso en cuyo interior siempre lleva su fiel lienzo con el lema “fin a la ley antiterrorista, la Pincoya presente”
No se porque, pero yo creo que ese lienzo lo hizo algunos de sus nietos, los cuales ya deben estar acostumbrados a que su abuelita vaya siempre a las marchas por los presos políticos Mapuche. Su tez es clara, un poco bronceada, por tanto andar por las calles de la población, bajo el sol extenuante, sus ojos son pequeños y negros, con un brillo que refleja nostalgia y dolor por un pasado ya extinto.
No lleva joyas, ni casi nada de valor, ni siquiera un par de aros en las orejas, es muy simple en su manera de vestir y andar, calculo que debe tener unos 60 años aproximadamente, si no es que mas.
Tiene una postura un poco erguida por el peso de la edad, pero siempre anda con la cabeza en alto y su caminar es algo pausado. Tiene voz y modales muy suaves, es como tratar con la abuelita propia, aunque yo no se si dejaría a mi abuelita participar de marchas. Tiene las arrugas típicas de las personas de su edad y de su contextura no se podría decir si es delgada o gruesa.
Psicológicamente se refleja que es una señora que prefiere estar en la calle entonando cánticos y gritos de protesta, a que estar tejiendo y ver pasar los años delante suyo.
Comienza la marcha y ella con una amiga que debe tener casi la misma edad toman el lienzo y siguen la marcha con los demás manifestantes, quienes son en su mayoría jóvenes, que perfectamente podrían ser sus nietos, incluso los jóvenes que siempre participan en estas manifestaciones la tratan como si fuera su propia abuelita y la protegen cuando carabineros disuelve con carros lanza aguas y zorrillos la marcha.
Ella sin miedo a que pueda pasarle algo sigue en la marcha entonando gritos, su voz es imperceptible ante los gritos de jóvenes Anarquistas.
Respecto a su pasado se tejen distintas historias, algunos dicen que ella es una de las fundadoras del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) .Otros dicen que es de un pasado humilde, que es analfabeta y que ella sola saco a sus hijos adelante al huir de las golpizas de su marido.
Lo cierto es que al ver su mirada un poco melancólica se refleja un pasado de lucha y un presente que difiere a lo que de joven soñó y por el que entrego su juventud.Recuerda las jornadas de protesta de los años 60, donde toda su generación vibro en torno a la lucha armada, admirando a Cuba y al esbelto guerrillero heroico, Ernesto “Che” Guevara, pintando murales por doquier.
De día en las jornadas de trabajo voluntario por la unidad popular, de noche en torno a una fogata y una guitarra con los compañeros, tomando vino navegado y soñando con un futuro Socialista.
Con el golpe de Estado vio delante de ella caer su sueño, junto a muchos amigos y compañeros, tal vez su gran amor también murió junto al amanecer socialista, dejándole esa mirada perdida y solitaria.
Mira ahora su presente, en la misma población de su juventud, pero ahora donde estaban los murales de las brigadas Ramona Parra hay unos murales del Colo Colo.
En el lugar donde se ubicaba el local de su célula política ahora esta la botillería de “Don Pituto” y los jóvenes, que en sus días corrían descalzos persiguiendo una pelota de trapo, fuman pasta base en la esquina y llevan unas Nike y sus ojos ya no tienen el brillo de la inocencia, al igual que los ojos de la abuelita están apagados por el furor consumista que llego para rematarlo todo..
“Ya nada es como antes”, suspira, mientras uno de sus nietos esta inmerso en la televisión, ella guarda su lienzo en su bolso y toma rumbo al centro. En sus pensamientos siguen pasando los recuerdos, las jornadas de protesta de los años ochenta, ella ya no era una señorita, se hacia adulta y tenia que cuidar a sus hijos, lo que no le impedía salir a golpear cacerolas y a prender neumáticos en la noche.
La marcha toma rumbo por calle Estado en dirección a la Alameda, cuando llega a ese punto todos se disponen a cortar el transito, los jóvenes cubren sus rostros y levantan barricadas, la abuelita estira su lienzo delante de los autos que tocan su bocina, protestando por no poder pasar y llegar luego a sus casas, “que le a pasado a esta sociedad”, se dice al ver tanto egoísmo y en su corazón retumban los gritos por el “NO” a Pinochet y el retorno a la democracia, creyendo que ahora si existiría una sociedad como la que de joven soñó.
Se oyen sirenas, Fuerzas especiales de carabineros se aproxima con el “Guanaco” para disolver la barricada y retomar el transito vehicular, todos corren, la abuelita con paso dificultoso busca refugio del chorro de agua que moja a los jóvenes que intentan resistir.Carabineros comienza a detener a los jóvenes y entre tirones los sube a la micro, mientras la abuelita mira con impotencia como todo sigue igual, como los que antes fueron sus compañeros de lucha, ahora ostentan cargos en el gobierno y viven llenos de lujos.
Con la misma mirada nostálgica que con la que llego, guarda su lienzo, vuelve a la población que esta cubierta por la noche y mientras con paso lento camina a su casa observa a algunos jóvenes que fuman en la esquina, a los que tan solo reconoce por el destello que emite su pito “prensado”, algunos vagabundos se juntan en torno a una fogata para escapar del frío.
Entra a su casa y ve a su nieto todavía inmerso en la televisión y nuevamente suspira “Ya nada es como antes”.



Cosmo, ARI

Extraido de: correomilitante.entodaspartes.net

viernes, 12 de junio de 2009

Desde el PODER POPULAR, hacia La AUTOGESTIÓN SOCIAL.


“Los anarquistas deberían entrar en todos los campos que susciten contradicciones en el capitalismo y ahí hacer que funcionen de la forma ‘mas libertaria posible’.

E. Malatesta


Si consideramos que el anarquismo en su teoría y práctica, rechaza todo tipo de autoritarismo y que tiene como fin una sociedad de seres humanos libres e iguales, se hace necesario referirse a como los libertarios deberíamos entender el tema del Poder.
Se suele ver la relación entre anarquismo y poder de forma antagónica y contradictoria, ya que se asocia la idea de poder a la de dominación y restricción de la libertad individual y colectiva. ¿Pero es el poder necesariamente sinónimo de imposición autoritaria?
Realmente pensamos que no. El poder no puede ser concebido como un objeto o como una cosa abstracta, es ante todo un conjunto de relaciones que se enmarcan dentro de una sociedad dividida en dos clases antagónicas. Por ende las relaciones de poder no se pueden entender por fuera de la lucha de clases.
Es por esto que diferenciamos dos formas de poder. El primero es el poder autoritario, el cual es de pocos y es entendido como un poder sobre algo y por ende esta estrechamente ligado a la dominación.
Sin lugar a dudas la estructura misma del capitalismo ha hecho que dentro de la sociedad existan diferentes intereses de clase en conflicto, ya que tanto el poder político, como el económico están en manos de una sola clase, en detrimento de otra mayoritaria.
El apropiamiento por parte de la burguesía de la riqueza social, ha generado por motivos obvios una situación constante de desigualdad, la cual ha sido mantenida históricamente a través de un poder autoritario que se impone sobre los intereses del pueblo.
Este poder administrado principalmente por el Estado, busca la centralización del poder político para proteger los privilegios, ejerciendo fundamentalmente la dominación y la violencia sobre las masas. De esta forma se ha constituido un poder alejado de los intereses del conjunto de la población.
El segundo tipo de poder, tiene que ver con el poder hacer, con el poder construir. Esta relación de poder se ejerce de forma colectiva y horizontal, y nace y se construye desde abajo. Se apunta a la destrucción de la ideología y la cultura dominante, y al mismo tiempo, a un proceso de construcción de nuevos imaginarios políticos y sociales, fomentando las capacidades organizativas en el campo popular.
A partir de este análisis, si es que el anarquismo busca la destrucción del Estado y el capital, ¿no seria necesaria la construcción de un poder emanado desde la clase explotada y oprimida, que se oponga al poder concreto con que nos dominan los poderosos?

¿Tomar o construir el poder?

Este debate también ha estado inserto históricamente dentro del campo popular, y tiene que ver con el problema de la centralización del poder, lo que se arrastra desde el surgimiento del pensamiento socialista. (Siglo XIX).
Por un lado las corrientes autoritarias, predominantes en la historia, buscan la centralización del poder en el Estado, monopolizando todo en la relación partido-Estado. Conceptos como el de dictadura del proletariado, han servido para que reducidos grupos de sujetos, representando y utilizando los intereses del proletariado, tomaran el poder del Estado, transformándose en una nueva clase dirigente, titulares del poder estatal, en donde todos los mecanismos de expresión y decisión son controlados por esta elite.
Para las corrientes anti-autoritarias o libertarias, el éxito de un proceso revolucionario depende de la capacidad de generar la sociabilización del poder en todos sus ámbitos, en donde prevalezca el protagonismo de las organizaciones populares, sobrepasando todo intento de generación de cúpulas de decisión. De esta forma prima la lógica de la construcción de poder, el cual surge desde abajo para oponerse a todo intento de centralismo y de burocratización.
Como libertarios nuestros esfuerzos deben apuntar al fortalecimiento de este proceso, teniendo como propósito disputarle los niveles de influencia al poder autoritario, posicionando cada vez más fuerte el poder construido desde abajo.
Esta construcción debe entenderse como un proceso de lucha, formación de conciencia, constitución de actores-sujetos, acumulación y consolidación de nuestras experiencias organizativas, ya que la importancia es que este poder se pueda ejercer desde los sectores populares como una forma de avanzar en el camino de la búsqueda del bienestar y la libertad, manteniendo nuestra independencia de clase. Por este motivo este poder es popular, ya que tiene estrecha relación con una herencia histórica y cultural de resistencia a la dominación de los de arriba.
Es por esto que nuestra propuesta es la construcción de poder popular con autonomía de clase, generando una distancia con otras ideas de poder popular que se han dado en el campo popular. Se puede utilizar el caso de la unidad popular en Chile en los 70 para ejemplificar esta diferenciación.
Para los partidos de izquierda que conformaban la Unidad Popular, poder popular era sinónimo de bases de apoyo al Gobierno, pues no concebían un proceso por fuera del Gobierno, ni contra el Estado burgués. Por otro lado, para sectores de base, y para el mirismo, poder popular quería decir la organización directa del pueblo, en oposición del Estado y el Poder Burgués. Sin embargo dentro de este ámbito también podemos hacer una diferenciación, pues el MIR solo le asignaba un rol al poder popular en la lucha contra el Estado, para luego desecharlo cuando el partido de vanguardia conquistara el poder. Ahora, para sectores de base ligados a experiencias de construcción popular en Comandos Comunales y Cordones Industriales, el objetivo era potenciar estas instancias para que se constituyeran como pilares de la futura sociedad.
Sin duda esta ultima interpretación del poder popular, es la que es necesaria rescatar ya que se aspiraba de forma intuitiva a que el pueblo se hiciera cargo directamente de sus propios asuntos, de apropiarse de sus propias vidas. Es importante rescatar las prácticas políticas que acompañan esta experiencia como una forma de afrontar los desafíos del presente. Esto nos lleva a preguntarnos como hubiera sido este proceso si hubiera existido un anarquismo social y organizado, que se hubiera propuesto fortalecer estas organizaciones populares en contra de las aspiraciones autoritarias.[1]
Si el anarquismo tiene como objetivo la sociabilización del poder, y si al mismo tiempo busca fortalecer las organizaciones populares, cual seria el problema de que el anarquismo organizado buscara la construcción de poder popular.
Como libertarios tenemos la misión de generar, fortalecer o potenciar el ejercicio del poder popular en los distintos sectores en donde estemos insertos. De ahí la importancia de buscar y construir caminos y formas que permitan y desarrollen el protagonismo de las bases. Estos principios metodológicos se deben tener en cuenta en nuestras prácticas políticas las cuales deben alejarse del mesianismo, recordemos que nuestro rol no es emancipar al pueblo, si no que el pueblo se emancipe, en este sentido debemos ser elementos mediadores que permitan que el nuevo modo de vida social surja de las profundidades de las organizaciones del pueblo.
Los anarquistas dentro de las organizaciones populares (comités de lucha, sindicatos, juntas de vecinos, centros culturales, clubes deportivos, federaciones estudiantiles, entre otras) deben luchar para que estos mantengan su independencia y el libre pensamiento de sus integrantes, con la única condición de que estas mantengan la solidaridad al momento de enfrentar sus problemáticas. Se debe impedir que estas organizaciones sirvan de instrumentos para la politiquería y los fines electorales de los partidos autoritarios, difundiendo y practicando siempre la autonomía, la democracia directa, la libre iniciativa y la acción directa. La idea es que la gente que se motiva por participar en una organización aprenda a participar directamente en la vida de esta y a no tener la necesidad de jefes o dirigentes permanentes.
Los resultados de este proceso podrán verse solo en momentos de ruptura, en donde comprobaremos si estas organizaciones logran ser la base de la nueva sociedad pasando por encima de la acción del Estado, siendo innecesaria la permanencia de este. Solo en este momento podremos afirmar que el proceso de construcción de poder popular fue exitoso. Es por esta razón que solo en la medida en que el poder popular logre sobrepasar y dejar sin legitimidad al poder autoritario, podemos enfrentarnos al inicio de la autogestión social.
En este sentido la autogestión no es posible dentro de una sociedad capitalista, ya que esta requiere la expropiación de la burguesía y su eliminación como clase. Como dijimos anteriormente el poder popular es clave en el proceso que logre acabar con las actuales relaciones de propiedad y gestión que son impuestas a través del poder autoritario. Por esta razón el poder popular se constituye como el principal medio para llegar a la autogestión. Al existir este en plenitud podemos empezar a gestionar la producción, la distribución, los servicios, etc. y solo aquí podemos hablar de una sociedad libertaria.
La Autogestión no implica sólo una cuestión táctica, una cuestión de medios, es ante todo, una cuestión de fines, es nuestro objetivo como revolucionarios. Promover dentro de los explotados, a que estos se hagan cargo de sus asuntos y den dirección colectiva a sus experiencias, es una de las tareas actuales que como movimiento debemos fortalecer. Las bases de la nueva sociedad deben desarrollarse en el cascarón de la vieja, es por esto que desde la construcción cotidiana configuramos la sociedad a la cual queremos aspirar
En definitiva sin poder popular no puede haber autogestión, es por esto que los anarquistas no podemos desentendernos del tema del poder, es mas, debemos abocarnos con todos nuestros esfuerzos a construirlo a diario porque es la base del futuro libertario que todos buscamos.

¡¡LUCHAR, CREAR, PODER POPULAR. CONTRA EL ESTADO Y EL CAPITAL!!


[1] Al respecto Jose Gutierrez Danton en su articulo El Anarco-comunismo, fundamentos teóricos y prácticos, plantea la falta de una alternativa anarco-comunista clara durante la Unidad Popular, lo cual hubiera ayudado a que ésta última interpretación del poder popular se hubiera desarrollado, enriquecida por el acerbo teórico y práctico de las luchas y de la trayectoria del Anarquismo.

lunes, 8 de junio de 2009

SOLIDARIDAD CON LA LUCHA DE LOS PUEBLOS AMAZONICOS DEL PERU


PRONUNCIAMIENTO INTERNACIONAL LIBERTARIO


El siguiente comunicado es una iniciativa de solidaridad libertaria internacional con los pueblos indígenas y amazónicos del Perú, en su lucha por la defensa de sus tierras y su cultural ancestral. La misma que está siendo vulnerada y amenazada por el gobierno peruano en alianza con el Imperialismo, las transnacionales y la derecha (principalmente el APRA, Unidad Nacional y el fujimorismo), a través de los Decretos Legislativos inconstitucionales y violatorios, en el marco de la firma del TLC con los EE.UU.Desde la Unión Socialista Libertaria exhortamos a las organizaciones anarquistas, libertarias o afines de todo el mundo a firmar este documento, hacerlo suyo y difundir su contenido a través de sus espacios virtuales, listas de e-mail, periódicos, revistas, boletines, comunicados, murales, foros, actos públicos, culturales, políticos, etc., con el propósito de sentar una clara posición libertaria y militante sobre lo que acontece en el Perú.Por ello convocamos a los compañeros libertarios a organizar movilizaciones y mítines frente a las embajadas del Perú en cada país, en coordinación con otros sectores afines y en lucha, para denunciar las acciones del Estado y las transnacionales en nuestro país.Apelamos a la vocación solidaria que nos caracteriza como revolucionarios libertarios para hacer causa común por nuestros hermanos indígenas y para hacerles saber que no están solos, ya que sus luchas son las nuestras, hasta alcanzar la verdadera sociedad de plena libertad, autonomía y progreso humano, sin explotados ni explotadores.



¡SOLIDARIDAD CON LA LUCHA DE LOS PUEBLOS AMAZÓNICOS DEL PERÚ!


Las comunidades amazónicas e indígenas de la selva peruana (especialmente en Loreto, San Martín, Amazonas, Ucayali, Huánuco, Cuzco y Madre de Dios) nuevamente hacen sonar sus tambores de lucha y resistencia frente a las arremetidas del modelo económico neoliberal defendido por el gobierno peruano (con el Partido Aprista a la cabeza) y como medida de fuerza hacen el llamado a la rebelión popular tras el Paro General Indefinido acatado masivamente desde el 9 de abril de este año. Es decir, ya van más de 50 días en pie de lucha que sin duda vienen a ser un claro ejemplo de valor, organización y heroicidad.Este intenso proceso de lucha indígena y amazónica se inicia luego de que el Estado peruano contraviniendo sus propios tratados internacionales, está violando, sistemáticamente, el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que establece la consulta previa a los pueblos indígenas u originarios antes de cualquier tipo intervención en sus territorios por instancias ajenas a sus propias comunidades.Es decir, el gobierno aprista ha iniciado (o mejor dicho, ha reiniciado) una nueva etapa de saqueos y venta al mejor postor transnacional, de las tierras que por tradición e historia le corresponde a cada una de las comunidades (awajún-wampis, kichuas, arabelas, huaronis, pananujuris, achuar, murunahus, o chitonahuas, cacataibos, matsés, candoshis, shawis, cocama-cocamillas, machiguengas, yines, asháninkas, yaneshas y otras más, incluidos los “no contactados”) y que hoy reclaman su derecho a existir y resistir.El papel del Estado peruanoSe sabe que la Ley 20653, conocida como Ley General de Comunidades Nativas, dada por el gobierno de Velasco Alvarado, reconoció un 24 de junio de 1974, la "existencia legal y la personería jurídica de los pueblos indígenas amazónicos y sus territorios, declarándolos inalienables, inembargables e imprescriptibles", confirmándolo en la Constitución Política de 1979, siendo borrado de un plumazo por la Constitución fujimorista de 1993 (que marcaba el inicio de la dictadura cívico-militar del hoy sentenciado Alberto Fujimori) para dejar el camino abierto al despojo y saqueo por los gobiernos sucesores y abriendo la puerta para el Tratado de Libre Comercio (TLC), que con los Decretos Legislativos de la actual gestión aprista ya han adquirido fuerza de Ley.Tampoco dejemos de lado el hecho que ya desde que la propia Constitución fujimorista del 93, se dejó la puerta abierta para el despojo de recursos como mencionamos líneas arriba. Entonces es evidente que se ha empezado a ahogar y provocar el aislamiento de las comunidades, mientras la voracidad de las transnacionales lograba el establecimiento de concesiones en favor de empresas petroleras, gasíferas, mineras, turísticas y madereras en territorios que ancestralmente han pertenecido a los pueblos allí asentados.Es decir, esto ha allanado el camino para la normatividad que el propio Estado, -salteándose la instancia legislativa (Parlamento nacional), mediante diversos decretos legislativos- declare los territorios de los pueblos originarios: "negociables en función de la economía del mercado".Una vez más, el Estado peruano ha puesto en evidencia su carácter de instrumento de dominación y aprovechamiento de las clases explotadoras en nuestro país, que buscan seguir expropiando no sólo los derechos políticos, sino también los propios recursos a nuestras poblaciones indígenas (pueblos originarios) que hoy se levantan en rebelión contra el poder opresor.Como comunistas libertarios, declaramos que el derecho a la libre autodeterminación de las comunidades originarias y nativas es un ejercicio auténtico de poder popular, pues se basa en principios comunitaristas, de aprovechamiento y uso colectivo de los recursos naturales, y en las propias formas de trabajo y beneficio común que ancestralmente se conservan en la Amazonía que tiene 31 de los 114 zonas de vida o ecosistemas mundiales, 95% de los bosques del país y un importante potencial de recurso hídrico o hidro-energético. Indígenas del Abya Yala en pide de lucha
En el marco del Paro Indígena, se ha dado un importante reunión de comunidades originarias andinas en la región sur del Perú, específicamente en Puno. Este encuentro fue la “IV Cumbre Continental de los Pueblos y Nacionalidades Indígenas del Abya Yala” que culminó el pasado domingo 31 de mayo con el compromiso unánime por el respeto de la madre tierra y los recursos naturales en provecho del ser humano y el rechazo enérgico de la privatización del agua y a la presencia de empresas transnacionales y el modelo económico neoliberal.Todos estos postulados están comprendidos dentro de la “Declaración de Mama Quta Titikaka” (Lago Titiacaca, entre Perú y Bolivia), donde también se acordó movilizar a las organizaciones sociales y originarias para el mes de junio en defensa de los pueblos amazónicos y hacer marchas o mítines frente a la Embajada peruana en cada país.Es importante, así mismo, resaltar el carácter de esta Cumbre indígena que lleva en esencia el germen auto-organizativo por el cual nosotros, militantes libertarios, apostamos, ya que en sus recomendaciones finales se planteó “la construcción de Pueblos Plurinacionales Comunitarios, que se fundamenten en el autogobierno y la libre determinación de todos los pueblos”.Así mismo, cabe denunciar la labor que cumplen los medios periodísticos oficiales empeñados en desinformar, desvirtuar u ocultar las justas medidas que se viene acatando en la selva peruana; en contubernio con el gobierno neoliberal de turno y sus cabezas Alan García; el vicepresidente y almirante en retiro responsable de las matanzas en los penales durante el primer gobierno aprista de los 80s, Luis Giampietri; el primer ministro, Yehude Simon, otrora dirigente izquierdista, incluso encarcelado por sus ideas y ahora fiel guardián de la reacción aprista.Es claro ver que para la burguesía que controla el Estado bajo órdenes imperialistas, el camino hacia el despojo de las comunidades -que también constituye un plan para destruir su propio tipo de organización social y la relación que los entrelaza con su territorio- en su esencia se contrapone con el criterio occidental de propiedad privada y por ello significa un freno a la voracidad del capital transnacional que busca insertarse en esas zonas, usurpándolas en alianza con el Estado y convertirlas en feudos que garantice prosperidad y dominio a los explotadores.El mismo presidente Alan García miente “sutilmente” cuando dice que de los 63 millones de hectáreas que tiene la selva peruana, solo 12 millones le corresponde a las comunidades amazónicas, cuando en realidad son más de 25 millones, tal como afirma el dirigente y máximo representante de las comunidades en lucha, Alberto Pizango quien ha sido denunciado por “atentar contra la seguridad común y entorpecer los servicios públicos”, junto a los dirigentes indígenas Marcial Mudarra, los hermanos Saúl y Servando Puerta, Daniel Marzano y Teresita Antazu. Además Pizango ya había sido demandado por “rebelión, sedición y otros” ante la 44ª Fiscalía Provincial Penal de Lima y tiene una tercera denuncia ante la Segunda Fiscalía Provincial Penal de Utcubamba (Amazonas), por “alterar la tranquilidad pública en su modalidad de disturbios”.Está claro que todo este proceso de demandas y persecución judicial y política se enmarca dentro del afán por parte del Estado de criminalizar toda protesta popular y reprimir las justas demandas sociales, presentando ante la opinión publica como “simples vándalos o salvajes ignorantes del progreso que significa la globalización” a los hermanos y hermanas indígenas del Perú.En tanto, como libertarios entendemos que la lucha del pueblo indígena, amazónico y andino, por la defensa de sus territorios, de su organización, y de su cultura, se halla inscrita dentro de un programa mínimo que implica la conquista de las reivindicaciones de los pueblos oprimidos por el Estado, el Capitalismo y el Imperialismo.Esta plataforma mínima debería basarse en exigir el uso de la acción directa para exigir la expulsión de las transnacionales de sus territorios. Ello en defensa de la integridad y sostenibilidad del hábitat y el ecosistema de la región -la cual, hay que recordar, constituye uno de los "pulmones" del planeta-, y por un desarrollo sostenible y la explotación planificada de la flora y la fauna, en base a criterios determinados por las comunidades. Además, la autodefensa activa de sus territorios y la recuperación de los mismos.Por ello, creemos que la auténtica solidaridad activa con la lucha amazónica e indígena será profundizando la protesta popular (agitación, propaganda, huelgas, paros, acciones directas, etc.) e incorporando en toda plataforma de lucha, la de los pueblos originarios hoy.Apoyar la justa protesta de los pueblos indígenas y amazónicosAunque como libertarios no tenemos nada que esperar del Estado (mas que su destrucción), comprendemos a la lucha de los pueblos originarios como parte inmediata de un proyecto mayor por la liberación de los explotados, y en tal sentido se inserta en una estrategia más amplia o un programa máximo por la revolución social.En tal sentido, debemos apoyar las reivindicaciones que en lo inmediato conllevan a mejorar sus condiciones de vida y madurar su organización social, política y económica a fin de enfrentar al Estado y destruirlo desde dentro, edificando esos gérmenes del poder popular que derrumbarán a ese gigante con pies de barro que es ahora el Capitalismo, herido de muerte a nivel mundial, por una crisis global de la que no podrá recuperarse, si es que entendemos que tal crisis la deben pagar la burguesía y no los trabajadores.En tal sentido, apoyamos la lucha del pueblo amazónico y sus diversas comunidades por conseguir soluciones inmediatas y hacemos el llamado a:-Derogatoria de la normatividad que atente o vulnere los interese de las Comunidades Nativas y Campesinas. Es decir, la derogatoria de la Ley Nº 29317 o nueva la Ley Forestal y de Fauna Silvestre, producto de una apresurada y parcial modificación del Decreto Legislativo Nº 1090 (Ley de la Selva) y los conexos decretos legislativos 1089, 1064 y 1020. Es decir, los 99 decretos impuestos y jamás consultados a los pueblos.-Exigir el respeto de la autonomía y autodeterminación de las comunidades nativas y su participación política activa en la toma de decisiones y en la aprobación o no, a través de los mecanismos de la democracia directa (Asambleas populares, referéndum, etc.) de las normas legales o contratos de concesión.-Exigir beneficios y facilidades para que las comunidades o pueblos originarios puedan desarrollar sus actividades productivas, de comercio, e industrialización, con la perspectiva del control directo de estos procesos por los mismos pobladores basándose en principios autogestionarios y de socialización.-Exigir beneficios y facilidades para la apertura y promoción de la educación y cultura en las comunidades (desde estas y hacia estas). Más colegios, docentes capacitados, promover la profesionalización de los estudiantes indígenas. Es decir, la construcción de un sistema educativo racional y de calidad alejado de las tendencias competitivas y voraces que ordena el mercado capitalista mundial.-Exigir los mayores beneficios de las actividades de exploración y explotación del Petróleo y el Gas, en favor de los pueblos originarios, así como la edificación de Hospitales, carreteras y la infraestructura que requiera, siempre que sean de la aprobación de los pueblos mismos y se gestione los mecanismos para el óptimo control y administración por las mismas comunidades.-Cese inmediato a la campaña de criminalización de la protesta que ha emprendido el gobierno aprista y la derecha peruana, además del alto al hostigamiento de luchadores sociales y a la creación de constantes psicosociales que desvíen la atención social sobre los problemas reales en el país.
¡Solidaridad internacionalista con la lucha de los pueblos amazónicos del Perú!

¡Derogatoria inmediata de los Decretos Legislativos que atentan contra la soberanía de los pueblos indígenas!

¡Por la libertad y defensa del pensamiento, cultura y autodeterminación de todos los pueblos del mundo!¡Contra el autoritarismo del Estado a organizarse y luchar desde las bases!¡Abajo el TLC y demás tratados comerciales capitalistas!

¡Fuera transnacionales imperialistas y bases militares yanquis de Latinoamérica!

¡Alto a la criminalización de la protesta y libertad inmediata a los presos por luchar!

¡Viva las luchas heroicas de los pueblos indígenas del Abya Yala!

¡Todos somos amazónicos! ¡Arriba los que luchan!


Lima, 05 de junio del 2008


Firman:
1.- Unión Socialista Libertaria (Lima, Perú)

2.- Red Libertaria Popular Mateo Kramer (Colombia)

3.- Periódico Barrikada (Uruguay)

4.- Convergencia Anarquista Específica (Chile)

5.- Corriente Acción Libertaria (Chile)

6.- Huancayo Rebelde (Huancayo, Perú)

7.- Centro de Estudios Sociales Manuel González Prada (Huancayo, Perú)

8.- Columna Libertaria Joaquín Penina (Argentina)

9.- Organisation Communiste Libertaire (Francia)

10.- Asociación Obrera de Canarias (España)

11.- Frente de Estudiantes Libertarios (Chile)

12.- Federazione dei Comunisti Anarchici (Italia)

13.- Ateneo Autónomo de Contracultura y Estudios “La Libertaria” (Venezuela)

14.- Red Libertaria (Argentina)

15.- Antorcha Libertaria (Colombia)

16.- Revista libertaria Divergences (Bélgica)

17.- Colectivo de comunicación y agitación popular “Mecha” (Colombia)

18.- Colectivo ReXiste Riot Grrrl (Colombia)

19.- Estrategia Libertaria (Chile)

lunes, 1 de junio de 2009

POR EDUCACIÓN DIGNA AL SERVICIO DEL PUEBLO



¡¡¡JUEVES 4 DE JUNIO SECUNDARI@S A LA CALLE!!!!

!!MARCHA¡¡ JUEVES 04 DE JUNIO 10 AM, ESTACION MAPOCHO (METRO CAL Y CANTO)


Como Asamblea de Estudiantes Secundarios rechazamos la Ley General de Educación ya que conserva intactas las bases del lucro y defendemos la educación concebida como un bien social y público, que debe responder a las necesidades de transformación social y no a los requerimientos del sistema mercantil. Es decir, queremos una Educación Digna, Igualitaria, Gratuita, de Calidad, y al Servicio de los Estudiantes y la Comunidad en general, en donde todos y todas sean actores fundamentales del proceso educativo.

Es por ello que exigimos:

TARIFA ESCOLAR GRATUITA todo el año y a lo largo de todo el país, porque consideramos un hecho vergonzoso e indigno que estudiantes de regiones deban pagar hasta 500 pesos para asistir al colegio, y que nuestros padres y madres deban pagar el costo de la crisis al pagar nuestro pasaje escolar, siendo que este debería ser gratuito para todos aquellos que hacen uso de su derecho a la educación.

• FORTALECIMIENTO DE LA EDUCACIÓN TÉCNICA PROFESIONAL: articulación de la educación técnica profesional con la educación superior y prácticas profesionales pagadas -sueldo mínimo- y derechos laborales para todos los egresados de la educación técnica profesional.

MAYOR PARTICIPACIÓN DE LA COMUNIDAD EN LA EDUCACIÓN: Consejos Escolares Resolutivos en todos los establecimientos escolares y participación de toda la comunidad que pertenece a un establecimiento en la fiscalización de recursos, la construcción de proyectos educativos, la gestión educativa, la normativa interna y el curriculum. Reconocimiento de estudiantes, profesores, paradocentes, directivos, padres y comunidades locales, como principales actores educacionales y la participación efectiva de dichos actores en todas las instancias de decisión del Sistema Público Nacional de Educación.

Asamblea Secundaria
Mayo de 2009
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YA SABEN CABR@S, A MOVER LOS COLEGIOS, SALIR A LAS CALLES, APOYAR Y DIFUNDIR,

sábado, 30 de mayo de 2009

ANARQUISMO ANTISOCIAL. ¿ES LA GENTE NUESTRA ENEMIGA?


El tiempo ya no pertenece a las ideas sino a las acciones y ejecuciones. Hoy, lo esencial es la organización de las fuerzas proletarias. Pero esa organización debe ser obra de los mismos proletarios. Si yo aún fuera joven me instalaría en un barrio obrero, donde, participando en la vida laboriosa de mis hermanos, los obreros, hubiera al mismo tiempo participado con ellos en la gran obra de la organización.
Miguel Bakunin.


Hace algún tiempo llegó a nuestras manos un periódico anarquista catalan titulado “Antisistema”, dentro del cual venia un artículo que nos llamó mucho la atención, el que tenia por título “El anarquismo antisocial”.
Nos pareció interesante poder elaborar algún comentario sobre el artículo, debido a que actualmente dentro del movimiento libertario chileno se ha masificado esta interpretación de las ideas libertarias, lo que nos parece inquietante para las aspiraciones de la revolución social.
Luego de algunos párrafos leídos nos encontramos frente a un primer análisis sobre las posibilidades de alcanzar la meta de una sociedad sin clases, en donde principalmente se llega a la conclusión de que el anarquismo debe alejarse definitivamente de la ligazón con lo social si se quiere avanzar en estas pretensiones, ya que sino este “…corre el riego de desaparecer o aun peor de transformarse en una burda corriente mas dentro del espectro izquierdista o en una chabacana muestra más del espectáculo folclórico tan alentador para el sistema.”[i]
El articulo continua diciendo que el anarquismo debe ser antisocial y que no queda más que la guerra abierta y directa contra la sociedad, “…aislados de ella hasta que se produzca su aniquilación, …o la nuestra.”[ii] Dos motivos tienen los compañeros para hacer esta afirmación: La primera es lo que ellos consideran el fracaso absoluto de la inserción social (que en el caso chileno encierra a algunas iniciativas territoriales como preuniversitarios populares, centros culturales, colectivos, trabajo sindical o estudiantil, o cualquier instancia que tenga por objetivo el trabajo político-social); y la segunda es que para ellos “la gente está en otra” o en otras palabras la gente, “…sencillamente esta con el sistema, de su lado, en su barricada: es, lo queramos o no, nuestra enemiga.”[iii]
En nuestra opinión el anarquismo no puede estar alejado del ámbito social, ya que es principalmente una teoría social que se ha desarrollado autónomamente en el seno del pueblo, pues el hombre es de por sí una creación social. Sin sociedad el hombre es inconcebible, la convivencia social es la precondición y la parte más esencial de su existencia individual, pero también es la preforma de toda organización. “…los anarquistas deben observar incesantemente el carácter social del comunismo libertario. Enfrentados a un movimiento revolucionario de masas, debemos reconocer la necesidad de organizarla y dotarla de medios válidos, para luego entregarnos a ella de todo corazón.”[iv]
El que los anarquistas nos insertemos en los diferentes sectores en lucha y seamos parte activa de su organización, no tiene porque llevarnos a convertirnos en una burda corriente izquierdista, principalmente porque como libertarios nunca tendremos la intención de darle dirección a una organización social o popular, para verlos como un fin en sí mismo o como una marioneta fácil de manipular (como lo hacen muchas organizaciones políticas que se hacen llamar de izquierda). Estar presente en la organización social es importante en la medida en que ayude a impulsar cambios reales que traspasen los límites de la organización comunitaria o reivindicativa y que lleguen a remecer la estructura de la sociedad capitalista. No importa generar un centro cultural por generarlo (o cualquier iniciativa social), sino en la medida en que este sirva para generar una acumulación de fuerzas revolucionarias que permita alcanzar el plano de las transformaciones de fondo como camino a la liberación de los oprimidos y explotados.
Frente al supuesto fracaso de la inserción social como estrategia, no tenemos más que decir que tanto en Chile, como en otras experiencias latinoamericanas, han sido las iniciativas nacidas desde el anarquismo social las que han permitido un regreso organizado a las luchas populares y a una actuación social más profunda y comprometida con los trabajadores, los sin-techo, los sin-tierra, los pueblos originarios, los estudiantes, etc.
Esta inserción social ha dado muchos resultados, lo que no significa que el número de militantes y de grupos haya crecido considerablemente, sin embargo es innegable que se ha dado un crecimiento cualitativo, elevando los niveles de organización, lo que ha permitido el crecimiento de la influencia libertaria en los distintos frentes sociales, contribuyendo a su crecimiento y su proliferación.
Por dar un ejemplo, tenemos el caso brasileño en donde tanto la Federación Anarquista de Rio de Janeiro (FARJ), como la Federación Anarquista Gaucha (FAG) están involucradas en proyectos de inserción social que han dado grandes resultados. La FARJ con su llamado Frente de ocupaciones está inmersa en el trabajo con las ocupaciones urbanas, que en Brasil poseen un carácter un poco diferente al de otros lugares del mundo. Aquí las ocupaciones las hacen personas pobres, que sufren violencia policial y/o del tráfico de drogas en las favelas o incluso viviendo debajo de puentes y autopistas, una situación muy común en los grandes centros brasileños. Las familias que no tienen dónde vivir terminan ocupando espacios que no se están utilizando, dándoles una finalidad social. Hoy, este Frente trabaja con cinco ocupaciones urbanas, fruto de una tarea que existe desde 2003 - de manera más organizada y como frente de la organización.[v]
Por su parte la FAG ha llevado a cabo hace algunos años una interesante experiencia con los colectores de basura. El Movimiento de Colectores de Brasil ha logrado desarrollar una estructura orgánica y una acumulación de experiencias notables, convirtiéndose en una actividad popular que merece más que atención y principalmente que sea conocida. El conocimiento de ella es útil para los movimientos sociales de cualquier lugar.
Los compañeros anarquistas que empiezan la organización de este movimiento de trabajadores tienen como orientación inicial organizar un grupo que vaya dando respuesta a los problemas de la vida cotidiana. La primera lucha fue por lograr la extensión de la energía eléctrica hasta la zona de trabajo que comprendía el galpón y las casas de alrededor, unas 50 familias, que la mayoría pertenecía a la actividad. Para este objetivo se ocupó la empresa distribuidora de energía para la zona y también la Intendencia. Todo el barrio, toda la Villa, acompañó esta medida de ocupación y tuvo tono muy combativo.
Este movimiento comienza a funcionar a partir del 1er. Congreso Nacional realizado en junio de 2001. Pero ya se venía procesando la creación orgánica del Movimiento desde 1998. Se coordina con algunos Estados tales como: Río Grande del Sur, San Pablo, Minas Gerais, Río de Janeiro, donde cada Estado tenía la tarea de hacer contacto con otros Estados y regiones de Brasil. Junto al 1er Congreso estuvo la marcha de los Moradores de la Calle, que también viven de la tarea de recolección. Esta Marcha contó con la participación de aproximadamente 5 mil personas, tuvo las siguientes reivindicaciones centrales: reconocimiento legal de su carácter ciudadano, ya que carecen de documentos y no son censados por el Estado; reconocimiento de la tarea laboral realizada ya que no se reconocía derecho jubilatorio ni de ningún tipo. Por ejemplo no podían atenderse en hospitales porque allí pedían los requisitos documentales y laborales. En relación a todas estas luchas hubo coordinación con otras fuerzas: el Movimiento de Trabajadores Desempleados, el Movimiento Nacional de Lucha por Moradía, Movimiento Sin Tierra, algunos sindicatos locales, Comité de Resistencia Popular (nacidos dentro de un galpón de reciclaje y que hoy tienen una serie de tareas concretas de apuntalamiento del conjunto de la acción del Movimiento de Catadores, también de organización de tareas barriales, sociales y culturales), Movimiento de los Atingidos por Barragem (personas afectadas por la construcción de represas que dejó en la calle sin vivienda y sin tierras a mucha gente, dentro de los que hay muchos pequeños productores agrarios).[vi]
Por otro lado existen experiencias en Argentina con organizaciones de trabajadores desocupados y piqueteros, en donde se promueven las ideas de independencia de clase, el rechazo a la democracia representativa a favor de la democracia directa, el uso de la acción directa de masas, las asambleas barriales y las asambleas generales como órganos máximos de decisión. Cabe destacar también la experiencia en Chile realizada con allegados y deudores habitacionales, los cuales impulsaron la lucha por la vivienda digna y un resurgimiento de las movilizaciones de los pobladores desde el 2000 en adelante.
La constante en este tipo de experiencias es el intento de vincular las luchas por las demandas de corto plazo (vivienda, educación, mejoras laborales, entre otras), con las reivindicaciones de cambio social radical del anarquismo. Es por esto que la inserción social lejos de ser un fracaso, es la estrategia a seguir para lograr la acumulación de fuerzas necesarias para la construcción del poder popular. Difícilmente fuera del ámbito social el anarquismo podría ser una alternativa viable para dar paso a una sociedad libre.
Desde este punto de vista, es necesario el establecimiento de un referente que logre instalar una cultura política libertaria al interior del movimiento popular, como una manera de impulsar desde las bases una salida al sistema de dominación. En este sentido, si bien compartimos el análisis de que “la gente está en otra”, estamos lejos de compartir el hecho de que la gente es nuestra enemiga por el hecho de no cuestionarse o no luchar por un cambio social. Razones para este fenómeno hay muchas, desde el perfeccionamiento del sistema de capitalista de dominación, cuya expresión máxima es el rol alienante que juegan los medios de comunicación, hasta la falta de referentes políticos que logren canalizar las demandas populares, a través de un proyecto concreto de cambio. Doble tarea tiene el anarquismo, al tener que luchar contra la hegemonía histórica de los sectores autoritarios al interior del movimiento popular. Sin duda en la medida en que se logre recomponer el tejido social, nuestra clase dejara de estar “en otra”.
La propuesta de los compañeros que realizan este articulo para lograr una alternativa libertaria pasa por, “…que nuestros esfuerzos no deben ir encaminados a llegar a la gente, sino directamente al ataque directo al sistema para además de conseguir un cierto debilitamiento en el, crear las condiciones para que la gente susceptible de poder querer escuchar, tenga la posibilidad de hacerlo (…) Deja una ciudad sin luz tres días y una minoría cabreada comience con saqueos, y eso se puede entender como pólvora, y se decrete el estado de sitio y los gobernantes contienen la respiración. Ese es el momento de la propaganda la de los hechos y no al revés.”[vii]
Para este objetivo las tácticas a seguir deben ser las siguientes: “1- La guerra sicológica contra el enemigo; esto es propaganda en el sentido clásico del término (escrita, hablado o pintada). 2- Ataque directo al sistema para debilitarlo y generar situaciones donde se nos pueda oír.
Más que criticar la factibilidad de estos propósitos nos interesa resaltar los aspectos negativos de esta alternativa. Sin duda para llevar a cabo estas pretensiones es necesario caer en la dinámica de grupos clandestinos, que lleven a cabo acciones de manera profesional, ocupando toda su vida militante a una entrega absoluta “casi heroica” por este cometido.
Los movimientos clandestinos son ciertamente capaces de desarrollar, en su círculo limitado, un grado superior de disposición al sacrificio y al sufrimiento físico en los individuos en bien de la revolución, pero les falta el contacto amplio con las masas populares. Por eso ocurre que cada uno de los adherentes de esa especie de movimientos pierde, sin darse cuenta, toda noción exacta de los verdaderos acontecimientos de la vida real y el deseo se convierte en parte de sus pensamientos. Pierden lentamente el sentido de la actividad constructiva y su pensamiento evolutivo toma una dirección puramente negativa, llegando a plantear el placer por la destrucción.
Los actos individuales nunca pueden servir de fundamento para un movimiento social y de manera alguna son capaces de transformar el sistema social. Solamente pueden, en ciertos tiempos, atemorizar a algunos sostenedores del sistema existente pero no influyen en absoluto sobre el sistema mismo. Las transformaciones sociales son solamente factibles por movimientos de multitudes.[viii]
La principal crítica gira en torno a entender la táctica de la acción directa como un fin en sí mismo o como fin último, ya que principalmente lo que deseamos no es una noche de saqueos o una insurrección de unos días, al contrario lo que buscamos es la revolución social y como lo dice su nombre esta se construye a partir de un largo proceso de acumulación de fuerzas.
No nos queda más que decir que la proliferación de nuevas tendencias individualistas y antisociales, no hace más que hacerle un gran favor a nuestros enemigos de clase y a las tendencias autoritarias al interior del movimiento popular.
Creemos que en primer lugar es el espíritu personal el que anima e inspira un movimiento; cuando falta ese espíritu para nada sirve la organización. No se puede resucitar a muertos organizándolos. Donde realmente existe el espíritu y las energías necesarias, es la organización de las fuerzas sobre la base federativa y anti-autoritaria el mejor medio para avanzar en este largo proceso de acumulación de fuerzas. La estrecha cooperación de los individuos por una causa común es un medio poderoso para el levantamiento de la fuerza moral y de la conciencia solidaria de cada miembro. Es absolutamente falso el afirmar que en la organización se pierden la individualidad y el sentimiento personal.
Cuanto más estrechamente está ligado un hombre a sus prójimos y cuanto más profundamente siente sus alegrías y sus dolores, más hondo y rico es su sentimiento personal y más grande su individualidad.
Por eso el anarquismo no es contrario a la organización ni a la inserción social, sino su más ferviente defensor, claro está, suponiendo que se trata de una organización natural de abajo arriba, que nace de las relaciones comunes de los hombres y encuentra su expresión en una cooperación federativa de las fuerzas.
Compañeros creemos que ustedes se han adueñado de la definición menos acertada del anarquismo, la que históricamente han impuesto nuestros enemigos a través de su literatura,[ix] aquella literatura que en el anarquismo ha encontrado motivo para una actitud estética nueva y violenta, y que indudablemente ha determinado entre los anarquistas una dirección mental individualista y antisocial.

¡¡ Contra el estado y el capital. A crear poder popular!!



[i] Periódico Anarquista de Barcelona i Rodalies Antisistema. N°18. Octubre 2008. Pag.6
[ii] Idem.
[iii]Idem. (La negrita es nuestra)
[iv] Nestor Makhno. Acerca de la defensa de la revolución. www.nestormakhno.info
[v] El Brasil de la resistencia libertaria. Entrevista a la Federación Anarquista de Rio de Janeiro. www.cnt-f.org
[vi] Reportaje a un militante de la Federación Anarquista Gaúcha (FAG). Acción popular en la militancia de FAG. (buscar pagina de la FAU)
[vii] Periódico Anarquista de Barcelona i Rodalies Antisistema. N°18. Octubre 2008. Pag. 8
[viii] Rudolf Rocker. Anarquismo y organización. Pág. 24. www.cgt.es
[ix] Los diccionarios burgueses nos hablan del anarquismo sinónimo de: Caos, desorden, confusión ante la falta de autoridad, sin gobierno.

lunes, 25 de mayo de 2009

1° Mayo Clasista y Combativo


Los desafios del Movimiento Libertario


Es evidente que se ha iniciado un nuevo periodo de lucha para el movimiento popular, el cual ya ha tenido algunas expresiones concretas. Las últimas luchas de los trabajadores forestales, salmoneros, subcontratistas del cobre y de los empleados públicos; unido a las grandes jornadas de lucha de los estudiantes y las movilizaciones de allegados y deudores habitacionales, evidencian esta tendencia al ascenso del nivel de combatividad de los explotados y oprimidos.
Sin duda el contexto de crisis económica mundial ha provocado que se acentúen aun más las contradicciones históricas de clase, debido principalmente a que los costos de esta crisis capitalista ha recaído fundamentalmente en manos de los sectores populares lo que se ha traducido en despidos, alzas y precarizacion de la vida. Esta coyuntura ha provocado que tanto el bloque dominante como el movimiento popular deban adecuar sus estrategias y tácticas para enfrentar este nuevo momento histórico de la mejor forma.
Afortunadamente esta situación ha llevado a muchas expresiones políticas del proletariado ha comprender la necesidad de madurar y desarrollar un plan de lucha que permita organizar y unificar las diferentes luchas que se están desarrollando al interior del movimiento popular. Esto nos hace preguntarnos cual es el papel que esta jugando el anarquismo en este proceso. Para esto es necesario reflexionar sobre las falencias teóricas y prácticas que ha tenido el movimiento libertario en estos últimos años y por donde pasan las posibilidades para transformarse en una alternativa radical para la superación de la sociedad de clases.
Desde nuestra perspectiva el movimiento libertario esta comenzando un proceso de maduración, el cual no ha logrado alcanzar mayores grados de desarrollo por una serie de factores que están inmersos en la práctica libertaria.
En primer lugar esta el problema del sectarismo, el cual hace que no se acepten posiciones teóricas o practicas distintas a las propias, provocando una nula voluntad de transformar la sociedad. En algunos grupos anarquistas prevalece la visión de que el sectarismo es una virtud esencial del anarquismo, generando una tergiversación de la praxis libertaria lo que lamentablemente ha provocado el alejamiento de las masas.
Una segunda problemática tiene que ver con el cómo se entiende el trabajo político en la construcción de organizaciones sociales. Existe una tendencia a que muchas instancias de inserción social no consideren como relevante establecer lineamientos propositivos que estén articulados con los reales problemas de los sectores populares y que sean capaces de insertar las ideas libertarias al proceso de lucha.
Al contrario han predominado aquellas experiencias en donde las iniciativas políticas no logran superar la barrera del culturalismo y el activismo, idealizando un falso avance en el desarrollo de la acumulación de fuerza hacia la revolución social.
Que el anarquismo se haya alejado de las luchas sociales es culpa de tod@s nosotr@s, debemos ser auto-críticos de nuestra practica libertaria, y entender que la solución no pasa por seguir alejándose del movimiento de masas. Pensamos que es necesario avanzar en la construcción de un movimiento libertario fuerte, que sea capaz de llevar a cabo nuestras propias iniciativas, entendiendo la necesidad de unidad con otros sectores del mundo popular. Esta unidad debe basarse en las necesidades concretas de la lucha para así lograr alcanzar victorias significativas en el campo popular. Nuestra meta debe ser que las ideas libertarias lleguen a ser preponderantes dentro del proceso de recomposición del poder popular.
Para todos los que creemos en el comunismo libertario vemos fundamental la necesidad de una organización con estrategias y practicas comunes, que logre aglutinar a todos los individuos y organizaciones que conciban al anarquismo ligado con el ámbito social, ya que este nació en el seno de las luchas populares y no puede alejarse de estas. Es necesario posicionarse como un real referente que entienda el problema de la construcción, como la necesidad de situar los esfuerzos en un proceso de acumulación de fuerzas al interior de las organizaciones sociales y populares. Son en estas instancias en donde deben nacer las líneas programáticas para enfrentar las luchas del futuro.
Por lo tanto desde esta perspectiva de la realidad, extendemos el llamado a los distintos esfuerzos revolucionarios que existen dentro del movimiento libertario, a reflexionar desde su propia practica, cuáles han sido sus reales resultados, para que desde hay podamos avanzar en un real proceso de maduración, fortaleciendo los distintos frentes sociales y ejerciendo un rol protagónico en las futuras luchas de nuestra clase.