EL FIN DEL GOBIERNO CONCERTACIONISTA, EL TRIUNFO DE LA DERECHA Y LAS TAREAS DEL MOVIMIENTO POPULAR
Este cambio de gobierno se da luego que la Concertaci贸n administrara por 20 a帽os el modelo neoliberal heredado de la Dictadura, en una constante negociaci贸n y acuerdo con la Derecha, y bajo la protecci贸n y el benepl谩cito del empresariado. El bloque en el poder ha sido unido y s贸lido, y hasta el d铆a de hoy lo es, en la medida en que no hay grandes disputas de poder entre las distintas fracciones de la burgues铆a, y en que la “democracia de los acuerdos” siempre ha primado por sobre los conflictos. De este modo, el tipo de modelo econ贸mico que se ha instaurado en Chile -donde la precariedad del trabajo es la regla, donde pr谩cticamente no hay restricciones al negocio de unos cuantos por sobre las necesidades de las mayor铆as trabajadoras, donde hay Tratados de Libre Comercio con casi todos los pa铆ses del mundo, cuya contra parte es la miseria de los sectores econ贸micos m谩s d茅biles y la depredaci贸n de los recursos naturales, y donde la distribuci贸n del ingreso es asquerosamente desigual-, ha sido el eje de acuerdo, con matices cosm茅ticos, de la clase pol铆tica dominante.
Nosotros vemos que el resultado de las elecciones, con la Derecha en el gobierno, no va a cambiar el panorama. Si bien asumimos que hay diferencias -como por ejemplo, hay algunos derechos sociales m铆nimos que la Concertaci贸n no se decidi贸 a recortar, o bien no tuvo el tiempo para hacerlo-, estas diferencias no son de fondo. La Concertaci贸n instal贸, durante estos 20 a帽os, una visi贸n del pa铆s que es la hegem贸nica en la actualidad, y que expresa la legitimaci贸n de la desigualdad del capitalismo en aras de la “gobernabilidad” y de la “democracia”.
En ese sentido, hay que tener en cuenta que durante este 煤ltimo a帽o, en el per铆odo pre electoral, se dio una situaci贸n extra帽铆sima: la Concertaci贸n supuestamente estaba debilitada, dividida, pero el proyecto concertacionista se expresaba m谩s vigente que nunca a trav茅s de los diversos candidatos. Un Jorge Arrate que ven铆a del bloque gobernante, con ciertos reparos y cr铆ticas, pero que representaba a un PC muy af铆n a la Concertaci贸n, un MEO que se declaraba el continuador de la Concertaci贸n, un Eduardo Frei apoyado formalmente por los partidos de Gobierno, y Pi帽era que intentaba ofrecer lo mismo que la Concertaci贸n, pero “bien administrado”, “extendiendo los beneficios a la clase media” y “sin los vicios del pasado”.
En cuanto a la elecci贸n en s铆, y como explicaci贸n del triunfo de Pi帽era, vemos que hay una evidente crisis del padr贸n electoral. M谩s del 40% de las personas mayores de 18, no est谩n inscritas, no fueron a votar, anularon o dejaron el voto en blanco. Por lo tanto, Pi帽era fue electo con alrededor del 30% de los votos de los mayores de edad, sin un aumento sustancial del total de votos que hist贸ricamente ha tenido la derecha. Debido a esto, vemos al mismo tiempo, una mantenci贸n de las posturas pol铆ticas a nivel del electorado, es decir, no consideramos que exista una derechizaci贸n efectiva o profunda de la sociedad chilena.
Al contrario que los analistas pol铆ticos, nosotros pensamos que Chile no cambi贸, y justamente por eso sali贸 Pi帽era, pues, lo que s铆 explica su elecci贸n es la deslegitimaci贸n de la participaci贸n en las elecciones y en general de la pol铆tica institucional, y adem谩s una despolitizaci贸n profunda en t茅rminos de la completa ausencia de proyectos pol铆ticos en la sociedad chilena. En ese vac铆o de pol铆tica real, es que puede tener 茅xito una propuesta puramente propagand铆stica como la de Pi帽era. Este vac铆o, se expresa muy bien es lo program谩tico, en la medida en que la Derecha que llega al gobierno ha prometido “cosas” pero sin esclarecer las medidas que quieren tomar. Ellos han declarado simplemente que ellos har谩n las cosas bien. As铆, se autoproclaman como mejores administradores que la Concertaci贸n, sin corrupci贸n, y con caras nuevas.
Otro nivel de an谩lisis, son las implicancias inmediatas y directas en t茅rminos de las relaciones internaciones, pues se fortalece el eje de gobiernos m谩s reaccionarios de la regi贸n de Am茅rica Latina (Per煤, Colombia, M茅xico, etc.) lo cual es un gran impulso a los intereses imperialistas de EEUU, que justo en este momento est谩 en una nueva ofensiva, desde el Golpe en Honduras, y recientemente con la invasi贸n camuflada de “ayuda humanitaria” a Hait铆.
Otra implicancia directa del triunfo de la Derecha, es una probable restricci贸n del gasto social, por el 茅nfasis que ha hecho hist贸ricamente la Derecha en ese 谩mbito. Pero recordemos que ya est谩 bastante restringido, pues los derechos sociales durante la Concertaci贸n, como la Educaci贸n, Salud, Vivienda, han sido escasamente cubiertos a trav茅s de los recursos del Estado, a pesar de los bonos focalizados. El gasto p煤blico ha sido, en general, un salvataje constante a las inversiones de los capitalistas. En todo caso, sabemos que Pi帽era no puede ser dr谩stico en el recorte pues le puede hacer perder popularidad, y tambi茅n sabemos que en las finanzas p煤blicas, en el caso que el Estado de Chile se viera apretado, tanto la Concertaci贸n como la Derecha apelar铆an a recortar el gasto social.
Tambi茅n vemos que un aspecto importante es la reconfiguraci贸n parcial del panorama pol铆tico, pues ya desde antes de la elecci贸n diversos sectores hablaban de generar una nueva “coalici贸n progresista”. Sobre este asunto, hay varios elementos a considerar. Lo fundamental, y lo m谩s peligroso, es que estos sectores van a jugar a dos bandas, haciendo “oposici贸n constructiva” como ellos dicen, es decir, apoyando a Pi帽era en el gobierno y parlamento (ejemplo de ello es la buena recepci贸n de la idea del “gabinete de unidad nacional”), e intentando, al mismo tiempo, activar la movilizaci贸n social, instrumentalmente, en funci贸n de volver a ser gobierno, en la l铆nea de las declaraciones del presidente de la CUT, Arturo Mart铆nez.
Este nuevo bloque “progresista” puede agrupar a los partidos de la Concertaci贸n, a los partidarios de MEO, puede acercarse al PC y otras fuerzas de izquierda, o puede excluir a alguno de estos sectores, pero probablemente juegue a lo mismo. Aqu铆 se instala un falso dilema entre el “progresismo” y la Derecha, como ocurri贸 antiguamente con Dictadura vs Democracia, lo cual todo luchador social honesto debe combatir.
Como es posible que haya un vuelco de las fuerzas concertacionistas a la movilizaci贸n social, en funci贸n de recargar sus fuerzas, lo cual implicar谩 una instrumentalizaci贸n del movimiento popular, habr谩 que prepararse para hacer frente a un escenario de mayor movimiento, pero con una 贸ptica poco favorable para un proyecto revolucionario y aut贸nomo de las y los trabajadores y los pueblos. Nuestra apuesta pasa, en este sentido, por aprovechar las coyunturas que se puedan generar para fortalecer y construir la fuerza propia del campo popular, y enfrentar al r茅gimen capitalista, con independencia, autonom铆a y solidaridad entre las y los que luchan. Nuestra tarea, la tarea del movimiento popular, que siempre ha sido ardua, es defender lo poco que hay, y seguir luchando por lo que no tenemos, por lo que nos pertenece.
¡Por el Socialismo y la Libertad!
¡Arriba las y los que luchan!
Estrategia Libertaria – Corriente de Acci贸n Libertaria